La naturaleza siempre ha sido un ingrediente fundamental del éxito empresarial. Pero sólo recientemente los sectores privado y financiero han empezado a analizar la contribución de la naturaleza a la cuenta de resultados.
La publicación de las recomendaciones finales del Grupo de Trabajo sobre Divulgación de Información Financiera Relacionada con la Naturaleza (TNFD ) es el hito más reciente e importante en el cambio de los flujos de capital hacia resultados positivos para la naturaleza. Las recomendaciones proporcionan a las empresas una base clara para comunicar internamente y al mercado, especialmente a los inversores, su dependencia de la naturaleza y los riesgos e impactos asociados.
Es un paso fundamental en la remodelación de la propia infraestructura del sistema financiero para permitir economías positivas para la naturaleza. Y se ha recibido con una oleada de nuevas herramientas, enfoques y negocios para ayudar a las empresas a adoptar e integrar la información sobre la naturaleza en sus operaciones.
Nuestro segundo evento del Nature Investor Circle analizó las recomendaciones y sus implicaciones para las empresas y las instituciones financieras. Puede ver el evento completo aquí.
Recibimos a Lucy Almond, Presidenta de Nature4Climate, Vian Sharif, Fundador de NatureAlpha y Director de Sostenibilidad del Grupo FNZ, y Simon Pickard, Presidente del Comité de Inversiones de Impacto de UBP, para que compartieran sus opiniones sobre el cambiante panorama de la divulgación de información financiera relacionada con la naturaleza.
Esto es lo que hemos aprendido.
1. Estamos asistiendo a la aparición de divulgaciones relacionadas con la naturaleza
"Parece que cada día hay un nuevo marco, un nuevo requisito normativo que tenemos que empezar a considerar desde la perspectiva de la divulgación de información relacionada con la naturaleza", dijo Vian Sharif.
Las recomendaciones del TNFD pretenden normalizar la forma de evaluar y comunicar al mundo los riesgos, impactos y dependencias relacionados con la naturaleza, así como los parámetros de información. La medición de una línea de base hoy sienta las bases para evaluar e informar sobre cuestiones relacionadas con la naturaleza en el futuro.
"Uno de los problemas es que hasta ahora no se hablaba el mismo idioma", afirma Simon Pickard. "Este es un gran paso para crear ese lenguaje común".
Las recomendaciones se ajustan estrechamente a las del Grupo de Trabajo sobre Divulgación de Información Financiera Relacionada con el Clima (TCFD), lo que significa que las empresas y las instituciones financieras están empezando a incorporar la naturaleza en una imagen más holística de los riesgos relacionados con la naturaleza y el clima.
2. Una nueva ola de empresas está ayudando a anclar las divulgaciones en la buena ciencia.
"Si eres un inversor y estás analizando los datos de divulgación de 12.000 empresas de tu cartera, eso es todo un reto", afirma Sharif.
Los avances en los marcos de divulgación de datos sobre la naturaleza se están produciendo al mismo tiempo que un crecimiento tecnológico sin precedentes en nuestra capacidad para vigilar la salud de los ecosistemas. Esto ha impulsado una oleada de nuevas empresas, como NatureAlpha, que ayudan a empresas e inversores a navegar por el mundo en expansión de los datos sobre la naturaleza y a garantizar que los datos se basen en datos científicos fiables.
Pero las mediciones son sólo una parte de la ecuación para cumplir las recomendaciones del TNFD. Establecer objetivos que guíen la acción es otra. "Una vez que sepamos cómo medir la huella de una empresa o de una cartera de inversiones, podremos empezar a entender cómo se fijan los objetivos y cómo se cumplen a lo largo del tiempo", afirma Sharif.
3. La localidad es un gran reto.
El valor de los datos de divulgación depende en gran medida de la capacidad de una empresa para identificar la ubicación geográfica de cada punto de sus operaciones, una tarea nada fácil para las empresas multinacionales con cadenas de suministro complejas y de gran alcance. Para las instituciones financieras, este reto se complica cuando se considera una cartera completa de empresas.
"Una de las ventajas de esta aceleración en la presentación de informes sobre biodiversidad es que las empresas son más conscientes de lo que se les exigirá en el futuro en términos de localidad", afirmó Pickard. "Para muchas empresas, es la primera vez que piensan en ello".
Gracias a la evolución de la información y las herramientas geoespaciales, podemos empezar a comprender mejor el impacto de las empresas de todo el mundo en las distintas dimensiones de la naturaleza. Pero, como señaló Pickard, la diferencia entre la teoría y la práctica será grande. "Habrá mucha iteración. Esto es un primer intento".
4. La demanda de datos y herramientas impulsa la inversión en tecnología de la naturaleza.
Nuevas empresas favorables a la naturaleza significan nuevos flujos de inversión. Lucy Almond, Presidenta de Nature4Climate, compartió las últimas tendencias del informe State of Nature Tech, publicado recientemente por la coalición.
El informe, presentado en octubre, muestra que la tecnología de la naturaleza es una categoría de inversión nueva pero en crecimiento, especialmente en ámbitos como la alimentación y la agricultura y la medición, notificación y verificación digitales. De 2018 a 2022, las inversiones acumuladas en empresas emergentes de tecnología de la naturaleza ascendieron a 7.500 millones de dólares.
"Gran parte de esta inversión sigue concentrándose en Estados Unidos y Europa, pero estamos asistiendo a una oleada de innovación en el Sur global, donde los innovadores desarrollan soluciones para problemas locales", afirmó Almond.
5. Las comunidades y los conservacionistas deben tener un sitio en la mesa.
Para las principales instituciones financieras, los mercados de la naturaleza plantean muchos retos: navegar por un entorno normativo nuevo y rápidamente cambiante, equilibrar el doble objetivo de los beneficios financieros y ecológicos y garantizar que sus inversiones consigan realmente resultados positivos para la naturaleza.
Para Simon Pickard, Presidente del Comité de Inversiones de Impacto de UBP, la clave para superar estos retos es (a) fundamentar la toma de decisiones en datos científicamente sólidos; y (b) contar con las estructuras de gobernanza adecuadas.
"Cada gestor de fondos y cada empresa tiene que pensar en la gobernanza y la estrategia", dijo Pickard. "Va a ser un viaje iterativo, y solo se puede emprender un viaje iterativo si se cuenta con la gobernanza adecuada".
UBP puso en marcha su Fondo para la Restauración de la Biodiversidad hace poco más de dos años. La estructura de gobernanza del fondo, que incluye la experiencia de la Peace Parks Foundation y la Cambridge Conservation Initiative, permite que los conservacionistas y las organizaciones comunitarias tengan un sitio en la mesa. Este planteamiento constituye un respaldo esencial, ya que garantiza que las decisiones de inversión estén respaldadas por la ciencia y pensadas para las comunidades.
"Es muy importante crear un punto de encuentro para la colaboración que garantice que todos los agentes están formalmente facultados para participar", afirmó Pickard.
